Tras definir claramente tu visión y tus objetivos, puedes utilizar esta información para elaborar una hoja de ruta. De hecho, se trata de uno de los componentes más importantes de tu estrategia de digitalización, porque con la hoja de ruta defines el camino que tienes que seguir para alcanzar tus objetivos. Analiza los objetivos de tu empresa y, junto con tu equipo, planteaos la siguiente pregunta: ¿cómo llegamos hasta ellos? En una primera lluvia de ideas, puedes recopilar ideas de proyecto y medidas que, luego, puedes trasladar a una hoja de ruta. Piensa también en los recursos necesarios para implementar estas medidas. ¿Contáis con los conocimientos necesarios dentro de la empresa o es necesario iniciar una colaboración externa? También puede ser útil considerar la formación y la contratación de nuevos empleados.
Ten en cuenta lo siguiente: emprender el camino hacia la digitalización 4.0 de tu empresa es una tarea integral que puede influir en toda la estructura corporativa. Por eso, recomendamos abordar paso a paso un proyecto de tal importancia y magnitud. Así, en tu estrategia de digitalización, los procesos y proyectos individuales deben dividirse en pasos concretos. Por ejemplo, se puede comenzar con la instalación de un sistema ERP. Una vez finalizado este proyecto y el registro de todos los datos en formato digital, se puede continuar introduciendo la gestión de almacén digital vinculada al sistema ERP. De este modo, podrás digitalizar tus procesos gradualmente: desde la digitalización de la logística de almacén hasta el servicio posventa, pasando por el proceso de producción.